EL PROYECTO
El Grupo de Investigación en Sostenibilidad, Infraestructura y Territorio (SITE) de la UEIA, en su línea de investigación en Hidroclimatología, ha desarrollado desde el año 2005 a la fecha el trabajo Entendimiento de los principales impactos del cambio climático global en cuencas hidrográficas en zonas de alta montaña, en las cuencas de los ríos Claro y Otún en el Parque Nacional Natural (PNN) Los Nevados (Gutiérrez, Zapata, & Ruiz, 2007; Ruiz et al., 2009; Ruiz, Gutiérrez, & Zapata, 2010). Este esfuerzo en el largo plazo se ha planteado en siete líneas de interés, y busca desarrollar estrategias de adaptación para la conservación.
PARQUE NACIONAL NATURAL LOS NEVADOS
El PNN Los Nevados se encuentra en la Cordillera Central de los Andes Colombianos entre los 04°36’ y los 04°57’ latitud norte, y los 75°12’ y 75°30’ longitud oeste. Su jurisdicción incluye los límites de los departamentos de Caldas, Risaralda, Quindío y Tolima, tiene un rango altitudinal entre los 2.600-5.300 metros sobre el nivel del mar (msnm) que abarca ecosistemas de alta montaña (bosque altoandino, subpáramo, páramo propiamente dicho, superpáramo y glaciar). Actualmente, el Parque posee tres glaciares: el Volcán Nevado del Ruiz (5.321 msnm), el Volcán Nevado Santa Isabel (4.950 msnm) y el Volcán Nevado del Tolima (5.200 msnm) (Lotero et al., 2006).
ECOSISTEMAS DE ALTA MONTAÑA
Los ecosistemas de alta montaña tropicales se encuentran ubicados en las montañas de Centro y Suramérica a una altura que varía entre los 3.000 y los 4.500 msnm (Rangel-Ch, 2000). Cuatro franjas o rangos altitudinales han sido generalmente considerados para clasificar estos ecosistemas: i) Bosque Altoandino (3.000-3.600 msnm) que constituye una zona de ecotonía (transición) entre la vegetación cerrada de la media montaña y la abierta de la parte alta; ii) Subpáramo o Páramo bajo (3.600-3.900 msnm) caracterizado por vegetación abierta, con árboles pequeños y arbustos dispersos; iii) Páramo propiamente dicho (3.900-4.200 msnm) principalmente dominado por gramíneas y rosetas caulescentes, donde hay una máxima diversidad de plantas herbáceas y algunos arbustos; y iv) Superpáramo (alturas>4.200 m) caracterizada por vegetación herbácea y gramíneas dispersas en el suelo desnudo y roca (Rangel-Ch, 1997).
Debido a su ubicación geográfica (altitud y latitud) estos ecosistemas están sometidos a condiciones ambientales extremas. Se caracterizan por tener una alta biodiversidad y un alto grado de endemismo de fauna y flora. Adicionalmente, debido a sus condiciones climáticas y a sus características edáficas y de vegetación, estos ecosistemas cumplen funciones ambientales fundamentales, especialmente aquellas relacionadas con el recurso hídrico (Díaz-Granados, Navarrete, & Suárez, 2002). Entre muchos roles, se resalta que estos ecosistemas garantizan una oferta hídrica continua, en la medida en que almacenan el recurso, regulan los caudales y recargan acuíferos, especialmente en épocas de estiaje, además la captura y retención de Carbono, y la oferta de biodiversidad (Lotero, Dossman, Castillo, Giraldo, & Fernández, 2006).
Los páramos han sido considerados como uno de los ecosistemas más vulnerables a cambios abruptos en condiciones climáticas (Ruiz, Moreno, Gutiérrez, & Zapata, 2008). Se caracterizan por poseer un delicado equilibrio que puede alterarse fácilmente debido a presiones externas causadas por actividades antrópicas, como cambio en el uso del suelo para el cultivo de papa y ganadería extensiva (Castaño, 2002).